La Fibromialgia (FM) es un síndrome cuyo síntoma cardinal es el dolor muscular generalizado crónico, así como dolor en articulaciones, tendones y ligamentos. Se estima que afecta entre el 2 y 7% de la población; es más común en mujeres de 30 a 55 años de edad, sin embargo puede afectar a hombres y niños.
¿Cuál es la causa de la Fibromialgia?
No se sabe con certeza, aunque se ha relacionado con alteraciones en algunos neurotransmisores (sustancias que utilizan las neuronas para comunicarse) que regulan la percepción y la inhibición del dolor. También se ha asociado con anormalidades hormonales, especialmente con una hormona llamada cortisol. Las investigaciones genéticas han encontrado un componente hereditario para la Fibromialgia y otras enfermedades relacionadas a los factores contribuyentes para la presencia de esta enfermedad.
Existen varias enfermedades que se pueden confundir o pueden acompañar a la Fibromialgia, como artritis reumatoide, lupus eritematoso, hipotiroidismo (disminución en el funcionamiento de la tiroides), neuropatías periféricas (daño a uno o varios nervios), inflamación muscular por causas autoinmunes, metabólico o infeccioso.
¿Cómo se diagnostica?
No existe una prueba definitiva de laboratorio o gabinete para el diagnóstico de la Fibromialgia, por lo que el diagnóstico es eminentemente clínico, basado en un adecuado interrogatorio y una exploración física completa.
El médico es la persona indicada para diagnosticar y tratar cualquier padecimiento, así como para indicarle la mejor opción de tratamiento.
¿Cuál es el tratamiento de la Fibromialgia?
El tratamiento está basado en un enfoque médico multidisciplinario que tiene como objetivos el control del dolor y toda la sintomatología asociada, tratar los aspectos psicosociales e introducir un programa de ejercicio aeróbico para rehabilitación.