Investigadores del Institut de Recerca del Sida IrsiCaixa han identificado por primera vez ocho moléculas que podrían servir para mejorar el diagnóstico del Síndrome de Fatiga Crónica (SFC), en el marco de un estudio impulsado por la Obra Social La Caixa, el Institut d’Investigació en Ciències de la Salut Germans Trias i Pujol y la Conselleria de Salud de la Generalitat.
debidas al dolor crónico y las emociones negativas que sufren, que se acaba de publicar en la revista científica ‘Journal of Translational Medicine’, ha permitido demostrar alteraciones en este grupo de moléculas en personas con SFC, que parecen estar asociadas a un peor funcionamiento del sistema inmunitario, ha informado este martes IrsiCaixa a través de un comunicado.
El SFC es una enfermedad que afecta a los sistemas inmunitario, neurológico, cardiovascular y endocrino de las personas que lo sufren, lo que provoca un cansancio constante que no puede atribuirse a un esfuerzo reciente y que no mejora con el descanso.
El descubrimiento supone un importante avance para los pacientes, puesto que el actual diagnóstico se basa únicamente en la evaluación de sus síntomas, aunque los investigadores han remarcado la necesidad de confirmar los resultados mediante estudios más amplios.
Los resultados podrán mejorar el conocimiento de esta enfermedad, que en España afecta a una de cada 100.000 personas y cuyo origen es desconocido.
ENFERMEDAD MAL DEFINIDA
El coordinador del trabajo, Julià Blanco, ha explicado que las alteraciones de estas moléculas podría contribuir a mejorar la fiabilidad y rapidez del diagnóstico de esta enfermedad «compleja y, hasta ahora, mal definida».
La investigación también ha contado con la participación del grupo de investigación en Fatiga Crónica del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) y de la Clínica SFC de Tarragona, así como de distintas asociaciones de afectados.