El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad ha elaborado un documento para mejorar el conocimiento de los profesionales sanitarios sobre la fibromialgia a fin de «avanzar en unas pautas comunes de actuación con una perspectiva integral» y mejorar la detección precoz de esta enfermedad.
El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad ha elaborado un documento para mejorar el conocimiento de los profesionales sanitarios sobre la fibromialgia a fin de «avanzar en unas pautas comunes de actuación con una perspectiva integral» y mejorar la detección precoz de esta enfermedad.
Así lo ha asegurado la titular del ramo, Leire Pajín, tras presentar dicho trabajo a una representación de asociaciones de afectados por esta dolencia, que afecta al 2,4 por ciento de la población en España.
Considerada como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1992, se trata de un síndrome crónico de etiología desconocida, evolución compleja y variable que provoca un dolor generalizado que puede llegar a ser invalidante para quienes la padecen.
Por ello, con este documento se pretende ayudar a los profesionales sanitarios, especialmente a los médicos de Atención Primaria, en la toma de decisiones sobre el diagnóstico, tratamiento y otros aspectos relacionados con la enfermedad, así como avanzar en unas pautas comunes de actuación para mejorar la calidad de la atención a las personas afectadas.
Según la propia Pajín, de este modo se conseguirán resolver algunas de las principales dificultades, controversias e incertidumbres con las que se encuentran los profesionales sanitarios a la hora de establecer un diagnóstico de la patología.
Asimismo, con este documento, elaborado en colaboración con las comunidades bajo la supervisión de profesionales sanitarios, asociaciones científicas y las propias asociaciones de pacientes, también buscan mejorar la concienciación del entorno familiar, social y laboral y de toda la sociedad.
Por otro lado, la ministra ha avanzado que su Departamento trabaja también en el estudio de otras patologías como el síndrome de sensibilidad química múltiple que, al igual que la fibromialgia, requiere de una atención específica.