La fibromialgia sí tiene una causa. La enfermedad obedece a un «diagnóstico objetivo», defiende en Murcia el neumólogo Ignacio Blanco

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Las causas de la fibromialgia siguen siendo una incógnita, y de hecho durante mucho tiempo parte de la comunidad médica ha defendido que la enfermedad en realidad no existe. Sin embargo, en los últimos años esta percepción ha ido cambiando. El neumólogo Ignacio Blanco, un conocido investigador asturiano con raíces en Murcia, defiende que el síndrome puede tener «un diagnóstico objetivo». El científico detectó que algunos pacientes de fibromialgia padecían déficit de una proteína cuya ausencia se vincula habitualmente a la aparición de procesos inflamatorios. Blanco también relaciona la enfermedad con el incremento de la presencia de mastocitos, células que se encuentran en la mayoría de tejidos y que desempeñan un papel en la protección del organismo.
Ignacio Blanco, que fue jefe de sección de Neumología de La Arrixaca entre los años 1976 y 1978, regresó ayer a Murcia para participar, en el Reina Sofía, en una sesión clínica organizada por Ramón de Prado, jefe de sección de Aparato Digestivo. La actividad se encuadró en un curso del servicio de Medicina Interna. Blanco ha alcanzado notoriedad gracias a sus investigaciones sobre la relación entre la fibromialgia y el déficit de la alfa-1-antitripsina. Inicialmente, su interés en esta proteína se debía a su papel en algunas enfermedades respiratorias. Pero el neumólogo asturiano descubrió que entre los pacientes de fibromialgia, la incidencia del déficit de alfa-1-antitripsina es el doble que en la población normal. Es más, «se comprobó que con el tratamiento para ese déficit, los síntomas de fibromialgia desaparecían», defiende Blanco. «Cuando se retiraba la medicación, esos síntomas reaparecían», añade. Pero no todos los casos de fibromialgia pueden relacionarse con esta proteína, ni puede hablarse todavía de un tratamiento curativo y generalizable, matiza el científico.
Acción de los mastocitos
El neumólogo ha seguido investigando en este campo, y sugiere una relación entre la fibromialgia y la acción de los mastocitos, células del sistema inmune presentes en la dermis. Los afectados por fibromialgia presentarían, según la teoría del doctor Blanco, un ‘exceso’ de mastocitos, lo que generaría una hipersensibilidad del sistema nervioso central.
A raíz de sus investigaciones, el neumólogo cuenta ya con varias patentes, aunque todavía no se ha llevado a cabo un ensayo clínico, paso necesario para los hipotéticos tratamientos que, en todo caso, no llegarán a corto plazo.

Aconsejan Internet por cable para evitar problemas de salud

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Fernando Pérez, vicepresidente de la Fundación para la Salud Geoambiental alertó la noche del miércoles en el Club Diario de los riesgos para la salud de las emisiones de los routers. Pérez recomendó la conexión por cable, que aseguró que es más segura porque no emite radiaciones. El experto destacó especialmente el caso de los centros educativos con la puesta en marcha de la llamada escuela 2.0 que ha dotado de ordenadores a todos los alumnos de quinto y sexto de Primaria. Pérez señaló en la charla, organizada por la Escuela de Adultos de Ibiza, que en muchos colegios se opta por las redes inalámbricas porque resulta más económico que el cableado integral del centro. «Los adultos estamos ya formados, pero los niños, desde ya, están expuestos a radiaciones en las aulas y en casa», añadió.

Este experto detalló que entre las dolencias «que pueden» causar las emisiones de estas conexiones se cuentan problemas cardiovasculares, alteraciones de la conducta, insomnio, pérdida de concentración, migrañas, pitidos e incluso cáncer. «Hay que tener precaución con las emisiones», insistió Fernando Pérez a las alrededor de 150 personas que asistieron a la conferencia, que presentó Marisol Torres, directora insular de Medio Ambiente.

Sobre la legislación que regula estas emisiones, Pérez aseguró que es «antigua». «La tecnología y las investigaciones van más allá, pero la ley no llega», añadió. De la misma manera, explicó que mientras en España cada vez hay más usuarios de las redes inalámbricas, en otros países ya se han adoptado medidas para limitarlas. Señaló que la universidad canadiense de Lakehead las ha eliminado, lo mismo que en seis bibliotecas de París. Alemania ha recomendado no instalar más y Salzburgo está estudiando la posibilidad de prohibirlas en los colegios. Aunque reconoció que no hay muchos estudios sobre estas radiaciones, similares a las de los teléfonos móviles, sí indicó que se ha demostrado que las plantas expuestas a estas radiaciones no crecen y se les mueren las hojas.

«El cable, la fibra óptica, no es solo más segura para la salud, también para las conexiones. Es más rápida, más fiable y sin saltos», abundó. Ezequiel Cabado, presidente de la Fundación para la Salud Geoambiental, se mostró convencido de que con estas emisiones nocivas ocurrirá, a largo plazo, «como con el alcohol, el tabaco o el amianto». «No se adoptaron precauciones y hoy sus peligros son indiscutibles», concluyó.

Fernando Pérez detalló una serie de medidas para reducir el impacto de las emisiones para aquellos que no tengan conexión por cable: alejar el router wifi lo máximo posible de las personas, distanciar el ordenador del cuerpo, reducir el tiempo de conexión y apagar el router cuando no se esté utilizando.

Fernando Pérez también alertó de los riesgos de los teléfonos móviles, aunque rechazó algunos mitos, como que llevar el aparato en el bolsillo del pantalón debilita la calidad del semen. «Los móviles solo emiten radiaciones cuando se está hablando», indicó. Sí aseguró que está demostrado que hablar más de media hora al día puede tener efectos nocivos para la salud. El vicepresidente de la Fundación aseguró que los niños con sobreexposición prenatal pueden sufrir hiperactividad y que hay una mayor incidencia de tumores en el oído, la boca y el cuello, las zonas más expuestas a estos aparatos. Pérez recomendó usar los auriculares para hablar por teléfono, ya que permiten que el móvil esté alejado de la cabeza.

Concentración para pedir el reconocimiento como enfermedad del síndrome de sensibilidad química múltiple.

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Mercedes Escudero, afectada por el Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple, y su marido Miguel Ángel López, solo recibieron ayer el apoyo de Aurelio Quintanilla como representante del Foro Social de Segovia, pero mantuvieron su compromiso y secundaron ayer en Segovia la convocatoria de concentración que se desarrolla en distintas ciudades españolas los días 12 de cada mes para reclamar el reconocimiento de las enfermedades ambientales. En mayo, si su salud lo permite, volverán a repetir la acción reivindicativa que ayer realizaron en la Plaza Reina Doña Juana para romper el silencio y hacer visible ante la sociedad el drama de quienes viven aferrados a una mascarilla para evitar el dañino impacto que les causa agentes químicos para otros inofensivos, como un perfumen, un producto de limpieza o la tinta de un periódico.

Actualmente, la Fibromialgia (FM), el Síndrome de Fatiga Crónica (SFC), la Sensibilidad Química Múltiple (SQM) y la Electrohipersensibilidad (EHS) son consideradas enfermedades de sensibilización central y son numerosos los pacientes que presentan una superposición de estas patologías. Las dos primeras ya disponen de su código en la Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS, pero la Sensibilidad Química Múltiple y la Electrohipersensibilidad aún no han sido reconocidas como enfermedades. Organizaciones de afectados, sociedades científicas y colectivos sociales del país impulsaron la campaña reivindicativa de la que ayer se hizo eco Segovia a través de tan solo tres ciudadanos que reclaman un trato igualitario para las cuatro enfermedades de sensibilización central y el reconocimiento de los derechos que como enfermos tienen en el ámbito social, laboral, sanitario y jurídico las personas que las sufren.

La sensibilidad química múltiple ha dejado de ser cuestión de unos casos aislados para convertirse en una enfermedad emergente y una amenaza tangible para la salud humana, como demuestran la multitud de enfermos que la padecen y la alarma social que su existencia genera, recuerda la asociación de afectados de las cuatro enfermedades ASQUIFYDE en un escrito que será entregado el día 12 de mayo a representantes de la Organización Mundial de la Salud.

Lanzan una aplicación para móviles que mejora la calidad de vida de los celíacos

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Creado por profesores de la UAH junto con la ACM y EQUALTER
Un grupo de profesores de la Universidad de Alcalá, junto con la Asociación de Celíacos de Madrid (ACM) y EQUALTER, empresa especializada en ‘software’ para móviles y ciencias de la salud, han desarrollado ‘mobiCeliac’, una aplicación para móviles que mejora la calidad de vida los enfermos celíacos permitiéndoles seleccionar los alimentos a comprar cada día, elegir un restaurante con menú adaptado o disponer de información actualizada sobre su enfermedad.

Con esta aplicación, los interesados tendrán disponible en su móvil la lista de los casi 13.500 productos aptos para celíacos 2011, más de 500 establecimientos entre restaurantes y hoteles, con menús adaptados –principalmente, en la Comunidad de Madrid– e información relevante para celíacos y otras dolencias alimentarias (alérgenos, código de barras, fotografías, ingredientes), todo ello actualizado semanalmente y supervisado por la ACM.

La aplicación, que es totalmente gratuita, está disponible en español, catalán e inglés (y próximamente en francés, italiano y en el resto de lenguas de España) y se puede descargar en la gran mayoría de de teléfonos móviles y ‘tablets’ de última generación. En sus casi diez semanas de vida, las descargas de ‘mobiCeliac’ han superado las 5.000 unidades.

La enfermedad celíaca es una intolerancia al gluten que se presenta en individuos predispuestos genéticamente y que afecta al 1 por ciento de la población, aunque sólo el 10 por ciento está diagnosticado. En España se estima que puede haber unas 45.000 familias con enfermos diagnosticados y unas 450.000 con personas afectadas. El único tratamiento conocido es llevar, de por vida, una dieta estricta exenta de gluten, el compuesto principal de los cereales más comunes en occidente: trigo, avena, cebada y centeno.

EB pide que se reconozca a los enfermos de sensibilidad química …

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Vitoria, 12 abr (EFE).- El parlamentario de EB, Mikel Arana, ha pedido hoy al Gobierno Vasco que reconozca como enfermedades la sensibilidad química múltiple (SQM) y la electrohipersensibilidad (EHS), todavía no reconocidas como patologías por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Arana ha opinado que estas patologías deberían tener la misma consideración que otras enfermedades de sensibilización central como la fibromialgia o el síndrome de fatiga crónica, “a fin de conseguir un trato igualitario para las cuatro patologías”.

En su proposición no de ley, Arana ha reclamado el acceso de las personas afectadas por sensibilidad química múltiple y por electrohipersensibilidad a los derechos que les corresponden en el ámbito social, laboral sanitario y jurídico, así como la inclusión de los diagnósticos en los historiales clínicos automatizados de la sanidad pública vasca.

En ese sentido, ha pedido al Gobierno vasco que estas dolencias se tengan en cuenta en las valoraciones para conseguir una invalidez, minusvalía o ayuda a la dependencia.

Arana ha advertido de que estas patologías pueden provocar invalidez y hasta una dependencia y ha asegurado que, según los expertos, se prevé un aumento de estas enfermedades, sobre todo en mujeres, debido al estilo de vida (uso masivo de nuevas tecnologías y aparatos tecnológicos), y al consumo de alimentos con conservantes, colorantes, aditivos o desnaturalizantes. EFE

Pajín destaca el trabajo que realiza el Ministerio de Sanidad por los afectados por enfermedades raras

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La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, ha destacado este sábado que este departamento del Gobierno impulsa desde hace dos años una Estrategia en Enfermedades Raras del Sistema Nacional de Salud, que fue aprobada en junio de 2009 por el Consejo Interterritorial.

Ampliar fotoEn esta estrategia, de la que se pueden beneficiar las personas con fibromialgia, se abordan distintos aspectos para mejorar la prevención y el tratamiento de estas enfermedades.

Así, ha explicado que se está trabajando con organizaciones internacionales en el desarrollo de un sistema de clasificación y registro que permita conocer las personas afectadas y sus diferentes padecimientos y, además, se ha establecido un método de trabajo para identificar las necesidades de diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades

Pajín ha participado este sábado en la jornada de convivencia de las asociaciones de fibromialgia y síndrome de fatiga crónica de la

Comunitat Valenciana, celebrada en Benidorm (Alicante). En esta

jornada de convivencia se han desarrollado distintos talleres

destinados a mejorar la atención de las personas que padecen estas

patologías, según han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno en un comunicado.

La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad ha recordado que la fibromialgia está considerada una enfermedad rara. En concreto, se considera que una enfermedad es rara o poco común

cuando afecta a menos de cinco de cada 10.000 personas.

Leire Pajín también ha señalado que desde el departamento de Sanidad se están haciendo “importantes esfuerzos” en el campo

del tratamiento con los llamados ‘medicamentos huérfanos’, que están

indicados para el diagnóstico, prevención o tratamiento de patologías

raras. Por razones de escasa rentabilidad para las compañías

farmacéuticas, este tipo de medicamentos no suelen desarrollarse si no existen incentivos.

Para aumentar las investigaciones en este ámbito, el Ministerio puso en marcha hace cuatro años una iniciativa pionera en Europa: la

convocatoria de financiación clínica independiente, fijando como área

prioritario los medicamentos huérfanos. En este tiempo se han

destinado recursos públicos con este fin por un total de 70 millones

de euros.

Además, en los últimos siete años el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad ha impulsado ha resuelto la financiación en España de 49 medicamentos huérfanos, del total de 61 autorizados por la Agencia Europea de Medicamentos.

Con anterioridad se autorizaron dos y el resto de los autorizados a nivel europeo no se encuentran en España porque los laboratorios fabricantes no han expresado su intención de comercialización.

El objetivo del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, en colaboración con el Ministerio de Ciencia e Innovación, es seguir

impulsando en los próximos años el despliegue de la Estrategia de

Enfermedades Raras del Sistema Nacional de Saludm mediante más ayudas a la investigación y la creación de unidades específicas para el tratamiento de estas patologías.

La España sanitaria cohesionada y equitativa se rompe. La mayoría de las quejas se refieren a diferencias entre CCAA en materia de prestaciones sanitarias

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Redacción. Madrid
El Defensor del Pueblo ha entregado a los presidentes del Congreso de los Diputados y del Senado el informe anual correspondiente al 2010. En materia de Sanidad, esta institución ha recibido a lo largo del pasado año 536 quejas, 502 de ellas presentadas de forma individual y 34 de oficio. Y la mayoría de las quejas vienen ocasionadas por las diferencias entre comunidades en materia de prestaciones sanitarias.

La Defensora del Pueblo, María Luisa Cava de Llano, entrega el informe anual al presidente del Congreso de los Diputados, José Bono.

El informe señala que en las diferentes investigaciones realizadas constatan diferencias en las carteras de servicios la asistencia sanitaria, prestación farmacéutica, nuevas terapias y medicamentos, calendario de vacunación, salud mental o enfermedades raras.

Asimismo, habla de desigualdades en fibromialgia y fatiga crónica, diagnóstico genético preimplantatorio, cuidados paliativos y tratamiento del dolor, aplicación de técnicas de reproducción humana asistida a personas con VIH, catálogos de prestaciones ortoprotésicas, atención bucodental, cirugía de reasignación de sexo, daño cerebral sobrevenido, atención podológica a diabéticos, terapias contra el tabaco y ayudas económicas a personas celiacas.

El informe lamenta ?la confusión y el lógico rechazo? que genera en el ciudadano encontrarse ?en situaciones de falta de atención o de atención diferida?, provocadas por la gestión burocrática de los expedientes sanitarios, cuando se acude a un centro de salud radicado en una comunidad autónoma distinta a la suya de residencia. Para intentar solucionar estos problemas, la oficina del Defensor considera que las administraciones involucradas deben adquirir el firme compromiso de respetar los principios de equidad y universalidad que inspiran el sistema nacional de salud.

Listas de espera

La Defensora del Pueblo, acompañada del Defensor Adjunto, Manuel Aguilar, presenta el informe de la institución al presidente del Senado, Javier Rojo.

Otro ?principal problema? del sistema sanitario es la ?existencia de dilatados tiempos de espera? para las consultas especializadas, las pruebas diagnósticas o las quirúrgicas. ?Es menester dejar constancia ?según el informe- de que la tramitación del significativo número de quejas en relación con demoras en la atención sanitaria pone de relieve la existencia de un elevado número de pacientes que deben esperar meses, o incluso años, para ser diagnosticados o recibir tratamiento especializado?. Además, lamenta que la información institucional difundida por la Administración sanitaria no permita conocer ?datos desagregados por servicios de salud respecto a las respectivas demoras en la atención?.

Atención Primaria y Especializada

Las quejas de los ciudadanos ante el Defensor del Pueblo en el ámbito de la Atención Primaria se centran, básicamente, en restricciones en la movilidad de los pacientes dentro del sistema público sanitario, como consecuencia de dificultades para obtener una atención continuada y de calidad en sus desplazamientos a comunidades autónomas distintas a las de residencia; en problemas en el acceso a la atención sanitaria en centros de salud; y en inadecuaciones estructurales de centros y servicios e insuficiente dotación de profesionales en los mismos. Al igual que en el ámbito de Primaria, los indicadores de recursos en el de especializada ofrecen también significativas diferencias en el conjunto del Sistema Nacional de Salud.

Ley del tabaco

La ley del tabaco tiene también cabida en el informe del Defensor del Pueblo, que reitera la necesidad de adoptar medidas destinadas no sólo a reducir la inducción al consumo de tabaco, sino también a promover los legítimos derechos a la protección de la salud de los no fumadores. Respecto a las quejas, destaca las de entidades en defensa de los derechos de los fumadores o las relacionadas con las consecuencias para los empresarios de restaurantes que habían realizado las reformas necesarias de adaptación a la ley anterior.

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J. Fernández-Solà: “La Sensibilidad Química Múltiple es una enfermedad compleja, no se puede banalizar”. El doctor del Hospital Clínic de Barcelona asegura que cada vez hay más personas que sufren este trastorno

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La Sensibilidad Química y Ambiental Múltiple (SQM) es una patología aún no reconocida, no está considerada oficialmente como enfermedad, aunque cada vez afecta a más personas. Además de la incomprensión del entorno familiar y laboral de la persona que la sufre también se encuentra con el escepticismo de algunos médicos. La SQM consiste en la pérdida progresiva de tolerancia a agentes químicos tan diversos y comunes como productos de limpieza, colonias, disolventes, ciertos alimentos, medicamentos y radiaciones electromagnéticas. Para arrojar luz sobre esta cuestión se ha publicado recientemente el libro ?Sensibilidad Química y Ambiental Múltiple. Sobrevivir en un entorno tóxico? (Oxigen Viena Ediciones), escrito por los doctores Joaquim Fernández- Solà, médico consultor de Medicina Interna del Hospital Clínic de Barcelona, y Santiago Nogué, jefe de sección de la Unidad de Toxicología Clínica del Hospital Clínic. El doctor Fernández-Solà, profesor asociado de Medicina de la Universidad de Barcelona y autor también de ?Sobrevivir al cansancio?, nos da algunas claves para comprender mejor la SQM.

-Libros como el que han publicado sobre la SQM no hay muchos, ¿la poca documentación sobre esta patología es una de las grandes dificultades?
– Hay alguna aproximación con enfermedades relacionadas pero se trata la Sensibilidad Química y Ambiental de diferentes aspectos desde la toxicología. En este libro no estamos hablando de una intoxicación clásica sino de contactos crónico permanentes con sustancias que están en el ambiente.

-Por ejemplo?
-La contaminación ambiental clásica como pueden ser la de los hidrocarburos pero también en situaciones peculiares. En un ambiente laboral puede haber personas que trabajen con un disolvente que tiene una concentración de aquel producto al que repetidamente se están exponiendo e interaccionan con él. Entonces van haciendo respuestas persistentes irritativas, y al final acaban asociando otros síntomas asociados más crónicos como puede ser dolor de cabeza, desconcentración o insomnio.

-¿Cómo definiría la SQM?
-La Sensibilidad Química Múltiple es un trastorno, aún no tiene categoría de enfermedad. Se presentan múltiples síntomas ante la exposición habitualmente de productos tóxicos en el medio ambiente en personas sensibles. No todas las personas reaccionan igual ya que hay dos factores, el factor tóxico en el ambiente y el factor de sensibilidad personal.

– ¿Por qué no está considerada como enfermedad?
– La Organización Mundial de la Salud tiene un centro de diagnóstico de control de enfermedades en Atlanta que se encarga de estudiar todas las enfermedades y cuando hay fenómenos que son más globales los analiza en diferentes sitios. La evolución de la SQM es aún demasiado precoz. Hay comités internacionales y hasta el momento no ha habido un consenso científico suficiente como para que este trastorno tenga todas las características de llegar a aceptarla como enfermedad.

– ¿Por qué motivo?
– Hay muchos intereses en este campo. Todo el mundo entiende que esto es derivado del estilo de vida que tenemos. Por ejemplo, vamos en coche y consumimos y quemamos gasolina. En Barcelona, casi una tercera parte del tiempo estamos por encima de los límites que la Organización Mundial de la Salud no tolera como aceptables, incluso tenemos restricciones de velocidad para no contaminar. Esto probablemente no es fácil de cambiar.

-¿Y en el hogar?
– Si comparamos los productos químicos que tenemos en un domicilio normal a los que tenían nuestros padres, tenemos un auténtico laboratorio químico: disolventes, pinturas, quitaesmaltes, cosméticos, detergentes, neutralizantes, quitamanchas, insecticidas, ambientadores, pulverizadores? Supone un estilo de vida que comporta un modelo de sociedad que no va a cambiar probablemente en unos días.

– ¿Cómo se diagnostica esta patología?
– Cuando hay unos trastornos de este tipo se establecen grupos de trabajo internacionales que han propuesto criterios de diagnósticos de caso. Cuando estudias la SQM ves que no es de origen alérgico. Hay indicaciones, síntomas respiratorios o irritación de mucosas que empeoran en exposición a ambientes con estos productos volátiles químicos y mejoran cuando los evitas.

-¿Los síntomas son crónicos?
– Los síntomas tienen que ser crónicos, no sólo agudos, sino que duran más de tres meses en la misma persona. Por otra parte, no hay otras enfermedades que lo justifiquen. No es una persona que tenga un fenómeno alérgico al polen sino a una exposición a productos químicos. Y, en tercer lugar, tiene que ser dosis menores de las normales para no hablar de intoxicación.

-¿Cuántas personas estarían afectadas por la SQM?
– Cuando se ha intentado cuantificar no hay estudios extensos pero hay márgenes desde el uno por mil hasta el 5%. También se sabe que hasta un 15% de la población de manera puntual, no como enfermedad crónica, puede tener fenómenos. Tampoco todo el mundo tiene la misma intensidad. Hay casos leves, moderados, y algunos tan intensos que el paciente no puede ir a algunos ambientes sin aislamientos respiratorios.

– ¿Con la mayor presencia de las nuevas tecnologías y el uso por parte de la población de aparatos tecnológicos prevé que cada vez haya más casos?
– Sin duda. El factor ambiente está cambiando y está incidiendo exponencialmente el aumento de la carga química pero también el de la carga electromagnética. ¿Cuánto tiempo hace que tenemos wi-fi? También cada vez tenemos un mayor número de circuitos eléctricos en el domicilio o líneas eléctricas de alta tensión cercanas a las viviendas. Además tenemos una menor protección en la capa atmosférica y nos llega una mayor radiación ambiental atmosférica. Todo esto aumenta la carga electromagnética que recibimos y este conjunto de cargas, la química y la electromagnética, se suman y podríamos hablar de otros tipos.

– ¿Qué otros tipos?
– La carga de tóxicos alimentarios que nosotros consumimos, tales como conservantes, colorantes, aditivos o desnaturalizantes. Es decir, la carga alimentaria, la química y la de ondas ambientales se suman y nosotros hablamos de dintel de carga tóxica.

– La SQM afecta más a las mujeres que a los hombres, ¿por qué motivo?
– Tenemos una incidencia ocho veces mayor en mujeres que en hombres. En general, es mucho más frecuente en las mujeres porque las hormonas femeninas, los estrógenos potencian la sensibilización.

– ¿Este trastorno está asociado a otras enfermedades?
– Un paciente que empiece con una percepción ambiental con más facilidad va a desarrollar también dolor crónico y fatiga crónica. Son enfermedades que van en acúmulos. Ya hay propuestas a nivel científico que todas estas enfermedades son un conjunto de ellas entre las cuales estarían otras tan curiosas como las migrañas, el colón irritable o el bruxismo (apretar los dientes durante el sueño). Esto se llama síndromes de sensibilización central.

– ¿A qué se debe?
– Hay una evidencia científica de que todas estas enfermedades tienen un común que sería esencialmente neurológico, no siquiátrico. Éste es otro punto importante porque se han confundido o se han querido confundir estas enfermedades con un origen psiquiátrico. No es una fobia a los productos químicos. Estos pacientes no tienen trastornos psicopatológicos sino que son pacientes normales que su enfermedad les provoca a largo plazo no poder llevar una vida normal.

– Al no ser una enfermedad reconocida, ¿provoca también incomprensión en el paciente?
– Sin duda. Genera incomprensión para el propio paciente y también en su entorno familiar, laboral y médico. No hay una atención regularizada. El paciente no sabe dónde tiene que ir porque su médico de cabecera no puede asumir esta enfermedad y no hay centros especializados reconocidos en el sistema público de atención.

– ¿La SQM puede hacer peligrar la vida del paciente?
– No es una enfermedad que comporte un riesgo vital. Si comporta muchos casos de demandas de atención urgentes. Lo que sí es cierto es que hemos tenido algún caso de suicidio debido a la dificultad de afrontamiento de la enfermedad.

– ¿Qué consejos daría a los pacientes que sufren esta patología?
– En primer lugar que sepa que esto existe. Que analice los productos tóxicos que tiene en su entorno y haga una especie de diario a los que tiene contacto. Nosotros también tenemos un cuestionario de sensibilidad ambiental, que se está validando ahora en España pero ya se utiliza a nivel internacional.

-¿Y en el día a día qué recomendaciones haría?
– Por ejemplo, utilizar cosméticos de línea natural, derivados de aloe vera, aceite natural. O cuando se pone la lavadora en vez de utilizar un detergente aromatizante convencional usar bolas ecológicas. Llevar una dieta evitando las sutancias que tienen más aditivos colorantes. Es obvio que esto es mucho más caro y también es más difícil encontrar estos productos.

– ¿En Catalunya cuántos pacientes pueden sufrir la SQM?
– Empezamos hace unos diez años atendiendo de forma global a estos pacientes y llegamos a tener unos 1.000 pacientes. Probablemente ahora en su conjunto son unos 2.000 pero no hay un centro específico. Ahora tenemos menos facilidades que antes. Por ejemplo, en Bellvitge había un centro de Sensibilidad Química que dejó de atender. Tampoco se han creado programas específicos. En estos momentos no hay una oferta médica pública concreta donde dirigir al paciente. Lo que sí han aflorado muchos centros privados que están haciendo esta atención.

– A pesar de que los casos van aumentando la oferta médica no es suficiente?.
– Esto es exponencial. También hay muchos casos no diagnosticados y de diferente intensidad. Hay casos leves que simplemente con una consulta médica concreta identificando los agentes y disminuyendo la exposición puede ser suficiente. En otros casos tienes que hacer una intervención laboral y en otros incluso una solicitud de invalidez. Lo que sí es cierto es que hay afrontarlo a nivel médico con un programa de atención específico, como enfermedad compleja no se puede banalizar. Cuantos antes la afrontemos antes la solucionaremos.

– Vamos, que tenemos que tener muy en cuenta la SQM?
– Yo pongo el ejemplo del tabaco. Nosotros empezamos a entrar en contacto con el tabaco en el siglo XV cuando lo trajeron de América y hemos tardado 500 años en reconocer que era el tóxico más importante para la salud de las personas. Y ahora estamos haciendo campañas carísimas para evitarlo. Espero que con la SQM no tardemos tantos años en reconocerla porque ya están apareciendo las enfermedades derivadas y ya las podemos reconocer a nivel médico. Sin duda, lo que tenemos que hacer es prevención, a nivel personal, laboral y también social.

Las mujeres con fibromialgia tienen menos resistencia muscular en las manos

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Fuente: ARCHIVES OF PHYSICAL MEDICINE AND REHABILITATION 92 (1): 83-88, enero de 2011.
Autor principal: Virginia A. Aparicio.
Centro: Universidad de Granada.

Título original: Prueba de resistencia de fuerza en la mano como herramienta complementaria en la evaluación de la gravedad de fibromialgia en mujeres.

Resumen:

El objetivo fue determinar la capacidad de la prueba de resistencia de fuerza en la mano a la hora de discriminar entre la presencia y la ausencia de fibromialgia (FM) y la gravedad de FM en las mujeres.

El estudio se ha realizado mediante la metodología caso-control en el marco de Granada, sur de España. Han participado mujeres con FM (edad media + DE, n = 81; 50,0 + 7 años) y mujeres sanas (edad media + DE, n = 44; 47,7 + 6 años).

Se midió la resistencia de la fuerza en la mano (se usó una puntuación media en el análisis) en una prueba de fuerza isométrica máxima con la ayuda de un dinamómetro de mano. Se clasificó a las pacientes en la categoría de ?FM moderada? si la puntuación en el Cuestionario de impacto de fibromialgia (FIQ, por sus siglas en inglés) fue inferior a 70, y en la categoría de ?FM grave? si la puntuación en el FIQ fue de 70 o más.

Los niveles de resistencia de la fuerza en la mano fueron menores en pacientes con FM que en mujeres sanas (19,3 frente a 27,9 kg; p < 0,001) y en mujeres con FM grave (FIQ > 70) en comparación con aquellas con FM moderada (FIQ < 70) (16,9 frente a 20,2 kg; p = 0,02).

Los análisis de las curvas ROC revelaron que el umbral de la resistencia de la fuerza en la mano que mejor discrimina entre la presencia y la ausencia de la FM fue 23,1 kg (área bajo la curva [ABC] =0,88; 95% intervalo de confianza [IC], 0,82-0,94, p < 0,001), mientras que el umbral que mejor discrimina entre FM grave y moderada fue 16,9 kg (ABC = 0,67; 95% IC, 0,53-0,80, p < 0,05).

El análisis de regresión logística mostró que una resistencia de la fuerza en la mano de 23,1 kg o menos se asoció a tener una probabilidad 33,8 veces superior (95% IC, 9,4-121,5) de padecer FM después de delimitar la edad. En el grupo de FM, una resistencia de la fuerza en la mano de 16,9 kg o menos se asoció con una probabilidad 5,3 veces superior (95% IC, 1,9-14,5) de padecer FM grave.

La resistencia de la fuerza en la mano se reduce en mujeres con FM, así como en aquellas con FM grave con respecto a sus compañeras con FM moderada. La identificación de las mujeres que no cumplen con los estándares propuestos puede ser una herramienta útil e informativa para el médico.

Autores: Aparicio, Virginia A.; Ortega, Francisco B.; Heredia, Jose M.; Carbonell-Baeza, Ana; Sjostrom, Michael; Delgado-Fernandez, Manuel

Direcciones:

1. Departamento de Educación Física y Deportiva, facultad de Ciencias del Deporte, Universidad de Granada, Granada.

2. Departamento de Fisiología, facultad de Ciencias del Deporte, Universidad de Granada, Granada.

3. Departamento de Biociencia y Nutrición, Unidad de Nutrición Preventiva, Novum, Instituto Karolinska, Huddinge (Suecia).

Demuestran que la depresión altera la calidad de vida y los síntomas de las mujeres con cáncer de mama

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Realizada en la Universidad de Granada
GRANADA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) –

Una investigación realizada en la Universidad de Granada (UGR) ha demostrado que cuando las pacientes con cáncer de mama no presentan signos de depresión su calidad de vida es prácticamente idéntica a la de una paciente con gripe y no tienen ningún tipo de síntomas emocionales o cognitivos. Por el contrario, cuando se incrementa el nivel de depresión, no sólo se altera la calidad de vida funcional de las pacientes sino incluso la sintomatología consecuente.

Para llevar a cabo este trabajo, su autora realizó un estudio de campo en pacientes con cáncer de mama, con enfermedad común (gripe) y con una enfermedad grave y crónica (fibromialgia). A todas ellas les administró una batería de cuestionarios para medir el estado de depresión y ansiedad, el estilo cognitivo y la calidad de vida. Todas las pacientes con cáncer de mama tenían un buen pronóstico de supervivencia y no había evidencia de metástasis.

La investigación ha demostrado que no es la enfermedad del cáncer, sino la reacción consecuente y las habilidades de afrontamiento de la enferma, así como muy probablemente su entorno social, lo que va a determinar su calidad de vida, según ha informado en un comunicado la Universidad de Granada.

Por otra parte, uno de los resultados más novedosos y significativos de este trabajo resultó de la comparación de las pacientes con cáncer de mama y las pacientes con fibromialgia.

En concreto, la investigadora encontró que la mayoría de las pacientes con cáncer presentaba un nivel de depresión bastante bajo (sólo un 20 por ciento presentan índices de depresión elevados), mientras que en las pacientes con fibromialgia el nivel medio de depresión era indicativo de un estado alterado y casi todas las pacientes (84 por ciento) sufrían niveles de depresión que indicaban la necesidad de tratamiento clínico.

En las pacientes con fibromialgia esto se asocia a una percepción de deterioro de su calidad de vida muy importante (mayor del 60 por ciento), a un claro deterioro de su nivel de funcionamiento (mayor del 50 por ciento).

Este conjunto de resultados parece mostrar, en primer lugar, que una enfermedad como la fibromialgia, que genera síntomas más duraderos y de carácter más psicológico, induce mayores niveles de depresión que una enfermedad como el cáncer, en la que la amenaza vital es mayor pero el componente físico de la enfermedad es también sensiblemente mayor.

Por otra parte, sugiere de nuevo que una gran parte de la pérdida de la calidad de vida se debe a la inducción de estados depresivos consecuentes a la aparición de la enfermedad, más que a la propia enfermedad o a sus consecuencias físicas.

La autora de este trabajo es Carmen Martínez Valero, y lo ha realizado en el Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada.

La investigadora afirma que, si se utilizaran medidas de evaluación tan sencillas como contestar a un cuestionario estandarizado de depresión, “se podrían detectar a las personas con cáncer más vulnerables a desarrollar alteraciones psicológicas y derivarlas a un tratamiento psicológico especializado, donde pudieran aprender estrategias que les permitan afrontar de una manera más adaptativa su nueva situación de enfermedad y de esta manera mejorar su calidad de vida”.

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