Barcelona, 8 feb (EFE).- Los genes explican las enfermedades de fibriomialgia y fatiga crónica, en particular los 90 polimorfismos en el ADN que afectan al sistema inmunológico y nervioso de los enfermos, según un estudio de Genomic Genetics International.
El estudio, realizado a 3.000 personas, representa la única evidencia científica de marcadores genéticos asociados a la fibriomialgia, dando sustento al reconocimiento de que la fibriomialgia es una enfermedad con un origen neurológico, resultado de desequilibrios neuroquímicos a nivel del sistema nervioso central y no un trastorno psicológico de somatización.
Teniendo en cuenta los resultados, el doctor Jose Ignacio Lao, director de Genomic Genetics International, ha elaborado un programa individualizado que sirve de herramienta de ayuda dentro del proceso de diagnóstico y tratamiento de la fibriomialgia, para abordar a los afectados y prevenir el desarrollo de la enfermedad.
El nuevo programa consigue realizar el análisis de todas las posibles combinaciones genéticas, para cada una de las vías moleculares que pueden estar relacionadas con el origen de estos problemas de salud.
Las personas que padecen fibromialgia muestran un grado de vulnerabilidad frente a tóxicos y agentes ambientales en general que resulta muy superior al del resto de la población.
Su organismo reacciona de forma exagerada estímulos externos y muestran una hipersensibilidad muy acusada frente al dolor, lo que resalta como característica principal para suponer su diagnóstico.
En los enfermos hay tendencia a la falta o déficit de neurotransmisores, las sustancias químicas cerebrales responsables de la transmisión nerviosa, y por ello hay tendencia a la pérdida de memoria, a la depresión y a los trastornos del sueño. EFE